Recomendaciones destacadas:

  • La American Heart Association declaró al racismo estructural como una causa de mala salud y muerte prematura por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares en una nueva Recomendación presidencial.
  • La AHA exige que los aliados trabajen juntos para abordar los obstáculos del acceso a la salud generados por el racismo estructural.
  • Además, la AHA está desarrollando nuevos objetivos comerciales estratégicos con un mayor enfoque en la equidad en la salud.

Prohibida su divulgación hasta las 12:00 p. m. CT/1:00 p. m. ET del martes 10 de noviembre del 2020

DALLAS, 10 de noviembre del 2020 — El racismo estructural es una causa importante de mala salud y muerte prematura por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares, de acuerdo con una nueva Recomendación presidencial de la American Heart Association., con título “Llamada a la acción: El racismo estructural como una causa fundamental de las disparidades en la salud”, publicada hoy en la revista insignia de la AHA, Circulation. En la recomendación, se revisa el contexto histórico, el estado actual y las posibles soluciones para abordar el racismo estructural en Estados Unidos, y describe las medidas que la AHA está tomando para enfrentar y mitigar las causas primordiales de las desigualdades en la atención médica.

“Con esta recomendación, la American Heart Association reitera su innegable apoyo a los principios antirracistas. Vamos más allá de las palabras para tomar medidas inmediatas y continuas a fin de acelerar la equidad social. Cada persona debe tener la misma oportunidad de disfrutar de una vida plena y saludable”, declaró Mitchell S. V. Elkind, M.D., M.S., FAAN, FAHA, presidente de la American Heart Association, profesor de neurología y epidemiología en el College of Phyisicians and Surgeons de la Columbia University Vagelos y neurólogo responsable en el Irving Medical Center de NewYork-Presbyterian/Columbia University en la ciudad de Nueva York. "La American Heart Association trabajará con aliados para eliminar los obstáculos a fin de brindar condiciones igualitarias, pues hay vidas en riesgo. La gente que pertenece a las comunidades históricamente marginadas no merece menos, y la sociedad debe exigirlo”.

La AHA se está centrando con mayor intensidad en superar los obstáculos sociales creados por el racismo estructural debido a que dichos obstáculos contribuyen de manera significativa a la desproporcionada carga de factores de riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares (factores que incluyen la presión arterial alta, la obesidad y la diabetes tipo 2) en personas de raza negra, asiáticas, indígenas americanas y nativas de Alaska, e hispanas y latinoamericanas en comparación con personas blancas en EE. UU.

Si bien las tasas de muerte por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares disminuyeron durante las últimas dos décadas, hasta su estancamiento reciente, esta victoria no se compartió de manera equitativa en las personas que pertenecen a las comunidades de raza negra, asiáticas, indígenas americanas y nativas de Alaska, o hispanas y latinoamericanas.

  • Los estadounidenses de raza negra continúan presentando las tasas de muerte más altas por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
  • La tasa de muerte es casi un 30% más alta por enfermedades cardiovasculares (ECV) para esta población. Mientras que la tasa de muerte por accidentes cerebrovasculares es un 45% más alta para la misma población en comparación con las personas estadounidenses blancas de origen no hispano.
  • Los pacientes de raza negra e hispanos y latinoamericanos tienen una tasa de supervivencia significativamente menor cuando se les da el alta del hospital en contraste con los pacientes blancos, incluso cuando se discrimina por el nivel socioeconómico.

En la nueva Recomendación presidencial, se destacan tres puntos clave:

  • El racismo estructural es un problema actual y generalizado, que ha tenido una influencia histórica y no es simplemente un problema del pasado.
  • El racismo estructural es real y produce efectos adversos, ya sea evidente para algunos o percibido solo o principalmente por quienes se ven afectados por él.
  • La tarea de eliminar el impacto del racismo estructural en las desigualdades económicas, sociales y sanitarias es una responsabilidad compartida que debe pertenecer a toda la sociedad.

“El racismo estructural, por definición, no es una acción, comportamiento o creencia personal, no es algo que algunas personas o instituciones decidan practicar”, dijo Keith Churchwell, M.D., FAHA, presidente del comité de redacción de Recomendaciones y presidente del Yale New Haven Hospital en la ciudad de New Haven, en Connecticut. “El racismo estructural es una parte integrada de constructos legales, comerciales y sociales, y una característica de los sistemas sociales, económicos y políticos en los que todos existimos. Pese a que el racismo estructural ha existido durante siglos, la pandemia por el COVID-19 ha expuesto y exacerbado las desigualdades existentes en la salud, como lo demuestra la forma en que el virus se presenta con una predominancia desproporcionada en las personas de las comunidades de raza negra, asiáticas, indígenas americanas y nativas de Alaska, o hispanas y latinoamericanas”.

Además, la AHA anunció que tiene nuevos objetivos comerciales estratégicos, con un mayor enfoque en la equidad en la salud. Para el año 2024, la American Heart Association luchará por la equidad en la salud mediante la promoción de la salud cardiovascular para todos, incluida la identificación y eliminación de los obstáculos para el acceso a la salud y la calidad de esta. Específicamente, la AHA se ha comprometido a realizar lo siguiente:

  • impulsar los avances en la investigación y el descubrimiento;
  • generar conciencia, empoderar a las personas y hacer participar a las comunidades para mejorar su salud cardiovascular y cerebral;
  • promover incansablemente la mejora de la calidad de la atención médica y garantizar el acceso a la atención de médica para todos, e
  • innovar en nuevas soluciones para lograr una salud equitativa para todos. 

“Para que la American Heart Association continúe siendo una fuerza implacable para lograr que las personas de todas las comunidades tengan vivas más largas y saludables, tanto en EE. UU. como a nivel mundial, debe responder con valentía al racismo estructural”, afirmó Bertram L. Scott, presidente de la junta directiva de la AHA. “El racismo estructural en materia de vivienda, educación, atención médica y otros es un impedimento importante para el objetivo de la American Heart Association de lograr de manera equitativa que todas las personas tengan una buena salud cardiovascular”.

Además de trabajar con aliados para promover el cambio en el sistema, la American Heart Association está examinando sus propias prácticas y procesos organizacionales para asegurarse de que reciban con los brazos abiertos el antirracismo dentro de la AHA y de manera externa para reflejar mejor sus interacciones con voluntarios, miembros, partidarios y otras organizaciones con el propósito de poner fin a todas las formas de racismo.

“La AHA no puede por sí misma eliminar el racismo estructural, pero podemos actuar como un impulsor, coordinador y colaborador hacia ese punto final, en particular, dentro del ámbito de la ciencia cardiovascular, la medicina y la atención médica”, señaló Elkind. “Reconocemos que no todos piensan de la misma forma en relación con estos problemas, pero estamos convencidos de que estamos haciendo lo correcto. Esperamos que, a través del uso de nuestra base en la ciencia como nuestro principio y método guía, también podamos convencer a otros de que se nos unan en lo que pensamos que es el enfoque correcto de este problema”.

Los coautores y miembros del comité de redacción son Regina M. Benjamin, M.D., M.B.A.; April P. Carson, Ph.D., M.S.P.H., FAHA; Edward K. Chang, B.S.; Willie Lawrence, M.D., FAHA; Andrew Mills, M.P.H.; Tanya M. Odom, Ed.M.; Carlos J. Rodriguez, M.D., M.P.H., FAHA; Fatima Rodriguez, M.D., M.P.H., FAHA; Eduardo Sanchez, M.D., M.P.H.; Anjail Z. Sharrief, M.D., M.P.H.; Mario Sims, Ph.D., M.S., FAHA; Olajide Williams, M.D., M.S. Los conflictos de interés de los autores están en el artículo.

Recursos adicionales:

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Acerca de la American Heart Association

La American Heart Association es una fuerza incansable para un mundo de vidas más largas y saludables. Nos dedicamos a asegurar una salud equitativa en todas las comunidades. A través de la colaboración con numerosas organizaciones, e impulsados por millones de voluntarios, financiamos la investigación innovadora, abogamos por la salud pública y compartimos recursos que salvan vidas. La organización con sede en Dallas ha sido una fuente líder de información de salud durante casi un siglo. Comuníquese con nosotros a través de heart.org, Facebook, Twitter o llamándonos al 1-800-AHA-USA1.

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