Aspectos destacados de la encuesta:

  • La mayoría (82 %) de los empleados dicen que, algunas veces, se sienten agotados durante el ejercicio de su función profesional, y una cuarta parte (25 %) dice que se siente así a menudo o siempre.
  • En las organizaciones en las que se implementan las nueve políticas recomendadas por la American Heart Association, el 91 % de los empleados reportan un bienestar positivo en el lugar de trabajo, en comparación con solo el 51 % en las organizaciones en las que no se aplica ninguna de las políticas.
  • La implementación, incluso de forma incremental, de cambios en las políticas y la cultura del lugar de trabajo puede ayudar a mejorar el bienestar de los empleados y reducir el desgaste profesional, comúnmente conocido como burnout.

DALLAS, 10 de octubre de 2023 — En el Día Mundial de la Salud Mental, el 10 de octubre, la American Heart Association, una fuerza global cuyo objetivo es una vida más saludable para todos, comparte los resultados de una nueva encuesta que pueden ayudar a los empleadores a reducir el desgaste y mejorar el bienestar de la fuerza laboral hasta en un 40 %.

La Organización Mundial de la Salud define el desgaste profesional o burnout como un fenómeno de salud mental en el lugar de trabajo que se produce como resultado del estrés laboral crónico y no controlado y que se caracteriza por sensación de agotamiento, desconexión y negatividad relacionados con el trabajo, así como un menor desempeño profesional.[1]

“La exposición crónica al estrés puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades, como enfermedades cardíacas y ataques o derrames cerebrales, a lo largo de la vida y también está relacionada con trastornos de ansiedad y depresión mayor. Dado que las tasas de desgaste continúan aumentando, debemos reconocer que este no es un problema pasajero, sino un desafío de salud mental grave y continuo para la fuerza laboral”, expresó Eduardo J. Sanchez, M.D., M.P.H., FAHA, Director Médico de Prevención de la American Heart Association. “Esta encuesta ofrece una perspectiva tranquilizadora sobre cómo, con algunos cambios intencionales, los empleadores pueden generar un impacto positivo en la salud mental y el bienestar de su fuerza laboral”.

Los empleados no son los únicos que pagan el precio del desgaste. El estrés laboral excesivo puede generar costos estimados de hasta $190,000 millones en atención médica cada año y se vincula con un mayor ausentismo y una mayor insatisfacción laboral.[2],[3] Las investigaciones demuestran que, al promover el bienestar de los empleados, los empleadores pueden ayudar a mitigar estos costos y a lograr mejores resultados empresariales. Un estudio de 2019 determinó que los precios de las acciones de las organizaciones que priorizaron la salud y la seguridad de los empleados se apreciaron un 115 % en cuatro años, lo que superó al índice S&P 500 (en más de un 69 %) y a las empresas donde se indicó un menor apoyo interno a la salud (en más de un 44 %).[4]

La encuesta a 5,055 adultos trabajadores estadounidenses fue realizada por The Harris Poll en nombre de la American Heart Association, con el objetivo de comprender cómo los empleados se ven afectados por las nueve mejores prácticas basadas en evidencia para combatir el desgaste y promover la salud mental de los empleados. A pesar de la implementación de medidas positivas para el bienestar laboral, más de tres cuartas partes (82 %) de los encuestados informaron haber experimentado desgaste al menos de forma ocasional, mientras que los padres, los trabajadores de primera línea o esenciales, las mujeres, los trabajadores más jóvenes (generación Z y milenials) y los trabajadores de la comunidad LGBTQIA+ fueron particularmente propensos a sentirse agotados a menudo o siempre.

¿Qué pueden hacer los empleadores para ayudar?

Se determinó que las nueve políticas analizadas en la encuesta estaban asociadas con un mayor bienestar en el lugar de trabajo, según informaron los empleados, y siete de ellas también se asociaron con una disminución del burnout:

  • Evaluar en qué medida se alinean las tareas laborales y las habilidades requeridas para ellas.
  • Establecer responsabilidades y funciones claras.
  • Evaluar de forma periódica las cargas de trabajo.
  • Diseñar las funciones laborales con el aporte de los empleados.
  • Establecer una vía de capacitación para desarrollar las habilidades de los empleados.
  • Evaluar si los empleados se sienten apoyados para llevar una vida saludable.
  • Promover el bienestar general de los empleados.
  • Desalentar el uso de tecnología relacionada con el trabajo fuera del horario laboral.
  • Promover grupos de apoyo (recursos) para empleados.

En las empresas en las que no se aplica ninguna de estas políticas, solo el 51 % de los empleados informaron un bienestar laboral positivo, en comparación con el 91 % de los empleados de las empresas que han implementado las nueve políticas. Cabe destacar que, incluso a través de la implementación de una sola de estas políticas, se logró un aumento de las probabilidades de que los empleados estuvieran satisfechos con sus beneficios, tuvieran sentimientos positivos sobre su función actual y sus responsabilidades laborales, y manifestaran sentirse apoyados por su gerente.

Workforce Well-being Scorecard™ de la American Heart Association ofrece a los empleadores una evaluación integral de su cultura de salud y bienestar basada en las principales mejores prácticas, incluidas las políticas para apoyar la salud mental y combatir el desgaste. Visite heart.org/workforce para ver el informe completo de la encuesta y completar la evaluación.

Metodología de la encuesta

La investigación fue realizada en línea en los Estados Unidos por The Harris Poll en nombre de la American Heart Association y, en ella, participaron 5,055 adultos estadounidenses de 18 años de edad o más que trabajan a tiempo completo o parcial. El estudio se llevó a cabo entre el 13 de abril y el 10 de mayo de 2023.

Los datos se ponderan por separado por raza/etnia y, cuando es necesario, por educación, edad por sexo, región, ingresos familiares, tamaño del hogar, estado civil, situación laboral y tendencia a estar en línea para alinearlos con sus proporciones reales en la población. Luego, se combinaron los grupos en un total proporcional por raza/etnia.

Los encuestados fueron seleccionados entre aquellos que aceptaron participar en nuestras encuestas. La precisión de la muestra de los sondeos en línea de Harris se mide mediante la utilización de un intervalo de credibilidad bayesiano. Para este estudio, los datos de la muestra son precisos dentro de más de 1.9 puntos porcentuales utilizando un nivel de confianza del 95 %. Este intervalo creíble será más amplio entre subconjuntos de la población de interés encuestada. Todas las encuestas y sondeos por muestreo, utilicen o no muestreo probabilístico, están sujetos a otras múltiples fuentes de error que, en la mayoría de los casos, no es posible cuantificar o estimar, incluidos, entre otros, el error de cobertura, el error asociado con la falta de respuesta, el error asociado con la redacción de las preguntas y las opciones de respuesta, y la ponderación y los ajustes posteriores a la encuesta.

Recursos adicionales:

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Acerca de la American Heart Association

La American Heart Association es una fuerza incansable cuyo objetivo es prolongar la vida y la salud de todos. Estamos dedicados a garantizar la equidad en la salud en todas las comunidades. A través de la colaboración con numerosas organizaciones y el impulso de millones de voluntarios, financiamos investigaciones innovadoras, defendemos la salud pública y compartimos recursos para salvar vidas. La organización con sede en Dallas ha sido una fuente de información sobre salud líder durante casi un siglo. Comuníquese con nosotros a través de heart.org, Facebook, X o llamándonos al 1-800-AHA-USA1.   

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Hannah Stebenné: 214-706-1876; Hannah.Stebenne@heart.org

Para consultas públicas: 1-800-AHA-USA1 (242-8721)

heart.org y stroke.org

[1]“El desgaste, un 'fenómeno ocupacional': Clasificación Internacional de Enfermedades”. Organización Mundial de la Salud, 28 de mayo de 2019, www.who.int/news/item/28-05-2019-burn-out-an-occupational-phenomenon-international-classification-of-diseases.

[2] Goh, Joel, et al.“La relación entre los factores de estrés en el lugar de trabajo y la mortalidad y los costos de salud en los Estados Unidos”. Management Science, vol. 62, núm. 2, Instituto para la Investigación de Operaciones y las Ciencias Administrativas, febrero de 2016, págs. 608–28. https://doi.org/10.1287/mnsc.2014.2115.

[3]“Consecuencias físicas, psicológicas y ocupacionales del desgaste laboral: Una revisión sistemática de estudios prospectivos”. PLOS ONE, vol. 12, núm. 10, Public Library of Science, octubre de 2017, pág. e0185781. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0185781.

[4] Goetzel, Ron Z., et al.“El rendimiento de las acciones de las empresas estadounidenses que invierten en una cultura de salud”. American Journal of Health Promotion, vol. 33, núm. 3, SAGE Publishing, enero de 2019, págs. 439–47. https://doi.org/10.1177/0890117118824818.