Puntos destacados de la investigación:
- Uno de cada tres sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral en EE. UU. experimenta la inseguridad alimentaria, que es cuando una persona tiene dificultades para obtener suficientes alimentos o tiene la decisión difícil de elegir entre los alimentos y otras necesidades básicas.
- La tasa de inseguridad alimentaria entre los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral es casi el doble en comparación con las personas que no han sufrido uno, según un análisis de casi 1,900 sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral en EE. UU.
Prohibida su divulgación hasta las 4:00 a. m., hora del centro/5 a. m., hora del este, jueves, 3 de febrero del 2022
NUEVA ORLEANS, 3 de febrero del 2022: uno de cada tres sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral en EE. UU. tiene inseguridad alimentaria, que es casi el doble de la prevalencia entre las personas que no han sufrido un ataque o derrame cerebral, según la investigación preliminar que se presentará en la Conferencia internacional sobre ataques o derrames cerebrales 2022 de la American Stroke Association, un encuentro mundial de primera calidad para investigadores y médicos dedicados a la ciencia de los ataques o derrames cerebrales, y la salud cerebral que se llevará a cabo virtual y presencialmente en Nueva Orleans del 8 al 11 de febrero del 2022.
De acuerdo con la American Heart Association, la inseguridad alimentaria significa que una persona tiene dificultades para obtener suficientes alimentos o tiene la decisión difícil de elegir entre los alimentos y otras necesidades básicas. Se estima que aproximadamente 1 de cada 10 hogares en EE. UU. experimentó inseguridad alimentaria en el 2020. Aunque la inseguridad alimentaria no es un problema nuevo, la pandemia del COVID-19 aumentó la concientización sobre el problema y su efecto desproporcionado en las comunidades que han estado desfavorecidas de forma histórica.
Los determinantes sociales de la salud, como la raza, la educación, los ingresos, la pobreza, el aislamiento social y el código postal, tienen un efecto importante en la salud, incluida la salud cardíaca. Por ejemplo, la cantidad de dinero que tiene una persona puede afectar la capacidad de comprar suficientes alimentos o alimentos saludables. La inseguridad alimentaria que se genera como resultado es una barrera para una dieta saludable, que es un pilar fundamental en la prevención de las enfermedades cardiovasculares y los ataques o derrames cerebrales.
"Nuestro estudio es el primero en examinar la prevalencia de los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral que pueden tener poco acceso a los alimentos", dijo el autor del estudio May A. Kim-Tenser, M.D., M.H.A., FAHA, profesora asociada de neurología en la Keck School of Medicine de la University of Southern California en Los Ángeles.
Para comprender mejor la prevalencia y los factores de predicción de la inseguridad alimentaria entre los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral, los investigadores evaluaron la información de salud de la Encuesta nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES, del inglés National Health and Nutrition Examination Survey) desde 1999 hasta el 2015. Los 48,242 participantes se clasificaron como personas con inseguridad alimentaria según las respuestas a un Módulo de la encuesta de seguridad alimentaria para adultos de EE. UU. y según la prevalencia, los factores de predicción y las tendencias de la inseguridad alimentaria entre adultos de 20 años de edad o mayores, con y sin antecedentes previos de ataque o derrame cerebral.
El análisis observó lo siguiente:
- Entre 1999 y el 2015, 1,877 de las más de 48,200 personas estudiadas informaron por sí mismas tener antecedentes de un ataque o derrame cerebral.
- La proporción de sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral con inseguridad alimentaria aumentó del 6% en 1999 al 30% en el 2015. Por lo tanto, 1 de cada 3 sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral tuvo inseguridad alimentaria en el 2015.
- En el 2015, la prevalencia de la inseguridad alimentaria entre los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral fue casi el doble que la de las personas que no informaron tener antecedentes de un ataque o derrame cerebral.
- Varios factores se asociaron con la inseguridad alimentaria entre los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral: edad más joven, ascendencia hispana, niveles de educación más bajos, soltería y pobreza.
- Las personas hispanas tenían el doble de probabilidades de informar inseguridad alimentaria que las personas no hispanas.
- Tener un nivel de ingresos inferior, igual o ligeramente superior al nivel de pobreza federal (ingreso anual inferior a $24,250 para una familia de 4 personas) también se asoció con la inseguridad alimentaria.
"Este estudio es importante para determinar qué tan amplia es la inseguridad alimentaria y para identificar los grupos de poblaciones de alto riesgo. A su vez, las intervenciones que abordan la inseguridad alimentaria pueden ayudar a modificar los factores de riesgo del ataque o derrame cerebral, lo que reduce la carga de este", comentó Kim-Tenser.
"Las personas con ataques o derrames cerebrales suelen enfrentar la inestabilidad económica debido a la discapacidad, la pérdida de empleo y los costos de atención médica exorbitantes después de un ataque o derrame cerebral. Los profesionales de la salud pueden ayudar a generar confianza con los pacientes. Para ello, pueden comprometerse con ellos; preguntarles si tienen dificultades para obtener suficientes alimentos o si tienen la decisión difícil de elegir entre los alimentos y otras necesidades básicas; y brindarles apoyo o recursos a fin de que puedan abordar la inseguridad alimentaria", agregó Kim-Tenser.
Una limitación del estudio es que los hallazgos se basan en encuestas o en informes hechos por los mismos interesados, por lo que los datos están limitados por el hecho de que no se pueden verificar de manera independiente y objetiva.
"La inseguridad alimentaria es un factor de riesgo del ataque o derrame cerebral que se puede evaluar y abordar, y estos hallazgos, que muestran que 1 de cada 3 sobrevivientes de accidentes cerebrovasculares se enfrentan a la inseguridad alimentaria, tienen implicaciones importantes para la atención médica y la salud pública", afirmó Eduardo Sánchez, M.D., M.P.H., FAHA, FAAFP, director médico de prevención de la American Heart Association. "La inseguridad alimentaria puede poner a los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral en un mayor riesgo de sufrir uno por segunda vez, por lo que se debe evaluar y abordar como parte de la atención rutinaria después de un ataque o derrame cerebral. La American Heart Association ha creado fondos de impacto social centrados en la transformación a nivel comunitario para derribar las barreras sociales y económicas de la equidad en la salud, incluidos los determinantes sociales de la salud, como la inseguridad alimentaria".
Los coautores son Bruce Ovbiagele, M.D., M.L.S., M.B.A., M.A.S., M.Sc., FAHA; Daniela Markovic, M.S. y Amytis Towfighi, M.D., FAHA. La lista de declaraciones de los autores se encuentra en el resumen.
El estudio fue financiado por la Beca del Ataque o Derrame Cerebral de James y Dorothy Williams.
Las afirmaciones y las conclusiones de los estudios que se presentan en los encuentros científicos de la American Stroke Association y la American Heart Association son exclusivas de los autores y no constituyen necesariamente la política ni la posición de la asociación. La asociación no ofrece garantía de ningún tipo de su exactitud o confiabilidad. Los resúmenes que se presentan en los encuentros científicos de la Asociación no se revisan por pares, sino que los paneles de revisión independientes los seleccionan y los consideran en función del potencial que tengan de ser un aporte a la diversidad de temas y opiniones científicos analizados en el encuentro. Los hallazgos se consideran preliminares hasta que se publiquen como manuscrito completo en una revista científica revisada por pares.
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Recursos adicionales:
- English news release
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- Noticia de la AHA: Consecuencias de la inseguridad alimentaria a largo plazo para la salud (2021)
- Noticia de la AHA: Las tasas de inseguridad alimentaria son altas entre las personas con enfermedades cardíacas (2020)
- Comunicado de prensa de la AHA SS2020: La inseguridad alimentaria está relacionada con un mayor riesgo de muerte cardiovascular
- Las recomendaciones de dieta y estilo de vida de la American Heart Association
- Alimentación saludable
- Para obtener más noticias sobre la “Conferencia internacional sobre los accidentes cerebrovasculares 2022” de la ASA, síganos en Twitter @HeartNews #ISC22.
La “Conferencia internacional sobre accidentes cerebrovasculares” (ISC, del inglés International Stroke Conference) de la American Stroke Association es la reunión mundial de primer nivel dedicada a la ciencia y el tratamiento de las enfermedades cerebrovasculares. La ISC 2022 se llevará a cabo presencial y virtualmente en Nueva Orleans del 8 al 11 de febrero del 2022. La conferencia de tres días incluirá más de 1500 presentaciones fascinantes en 17 categorías que enfatizan las ciencias básicas, las clínicas y las de transferencia a medida que evoluciona la investigación para obtener una mejor comprensión de la fisiopatología de los ataques o derrames cerebrales con el objetivo de desarrollar terapias más eficaces. Participe en la “Conferencia internacional sobre accidentes cerebrovasculares” por redes sociales con la etiqueta #ISC22.
Acerca de la American Stroke Association
La American Stroke Association está comprometida con la prevención de los accidentes cerebrovasculares, la segunda causa de muerte a nivel mundial y una de las principales causas de discapacidades graves. Nuestro equipo está formado por millones de voluntarios para financiar la investigación innovadora, luchar por una política de salud pública más fuerte y proporcionar herramientas e información que salvan vidas para evitar y tratar los accidentes cerebrovasculares. La asociación, con sede en Dallas, dio sus primeros pasos oficialmente en 1998 como una división de la American Heart Association. Comuníquese con nosotros a través de stroke.org, Facebook, Twitter o llamándonos al 1-888-4STROKE.
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